Figura zapoteca de gran relevancia, equiparable a Tláloc para los aztecas y a Chaac para los mayas, estas deidades comparten elementos y significados simbólicos.
En nuestra ilustración, unimos la figura de Pitao Cocijo con la forma de una tortuga marina Laúd, creando una fusión que honra tanto lo mitológico como lo natural.
La ilustración resalta algunas de sus características más distintivas: la lengua bífida, las serpientes marinas en la parte superior de su cabeza y sus grandes orejeras.
En la parte posterior, aparece Pitao Cocijo en forma de una olla de barro, una representación muy común en la cultura zapoteca, ya que estas vasijas eran vistas como símbolos del agua, el elemento vital.